¿Donde iremos este año... con el niño?

  
   Terrible pregunta, diría yo. A veces, cuando salimos los fines de semana, por el hecho de que por motivos del trabajo no podemos "arrancar" hasta después de comer con unas cosas y otras, pensamos en cuando vendrá unos cuantos días seguidos para poder irnos un poco más lejos. Habitualmente, solemos salír en un radio de 100 km de nuestro domicilio. Yo creo que muchas veces pensamos en irnos a hacer grandes viajes, con distancias kilométricas enormes. Pensamos, tal vez, que en el extrangero hay mucho que ver, incluso más que aquí. Después de varios años saliendo con la Autocaravana, me he dado cuenta que si tienes pocos días de vacaciones, como las que suelo tener yo, dos semanas, si te planteas ir muy lejos, hay que prepararse a tener grandes jornadas maratonianas al volante, cosa que a mí no me importa en lo más mínimo. Pero a bordo vamos 3 y si uno de ellos es un niño, la cosa cambia y mucho...

   Viajar con niños:

   Supongo que, alguien se dirá: -yo, sin duda, antes que con mi suegra!!. Pues según se miré y en su justa medida, yo dudaría. Para un viaje, si es largo, un niño puede requerir de más atención si cabe que en condiciones normales. A mí en particular, el mio lo he podido sobre llevar gracias a la tegnología principalmente, y a la paciencia de mi mujer. Normalmente, ellos no se contentan con ver el paisaje, por muy bonito que este sea. Ni cuentan todos los coches blancos que pasan. NO. Ahora requieren de más estimulos, y yo lo comparo conmigo mismo cuando era pequeño y viajábamos con mi familia para ir al pueblo. Pues ahora necesitan, por ejemplo un dvd portátil, es una pequeña arma de disparar dibujos y películas muy útil. El que yo tengo, solo soportaba CD´s y DVD´s. Pero ahora ya los venden para un lápiz USB, y así no tienes que salir de casa con una ingente cantidad de soportes. También nos ha acompañado muy mucho el ordenador portátil. Gracias a él, en algún viaje, hemos salido de apuros gracias a su conectividad a internet, y el niño, pues particularmente el mio tiene ocupado casi medio disco duro de dibujos y películas. Y como tercera opción es la de los juguetes. ¡¡JUGUETES!! Estos se combierten en un entretenimiento más para él, y un dolor de cabeza para mí. Sobre todo con el volumen que pueden llegar a ocupar. Todo el día moviendo juguetes de aquí para allá. Yo los llevo normalmente encima de la capucha, bien ordenados en unas cajas de plástico. Luego a la hora de dormir los bajo a la cabina que nos hace de trastero eventual.

   En fin, puede que sea un paradigma personal, pero creo que con los niños no se puede hacer más, sobretodo cuando se trata de ir en marcha. Solo os recomiendo mucha paciencia y serenidad, solo así podremos hacer viajes más placenteros y tranquilos. Aunque con ellos ya se sabe...